El Gobierno de Nuevo León ejerció más de 719 millones de pesos en el rubro de comunicación social, lo que representó un gasto promedio de 1.3 millones de pesos diarios. La cifra rebasa de forma significativa los 360 millones de pesos que el Congreso local había aprobado para ese año.
Los recursos fueron destinados a la contratación de espacios publicitarios en medios, producción de materiales de imagen institucional, realización de encuestas y pago de asesorías en comunicación.
Si bien la administración estatal ha defendido la necesidad de informar sobre sus acciones y programas, diversas organizaciones señalan que el volumen de gasto resulta desproporcionado y podría responder a objetivos políticos más que a fines informativos.