Atole con el dedo

Una semana y ya termina el sexenio del presidente López Obrador. Confieso que, como muchos mexicanos, yo era parte de los que tenían esperanza en ver un país renovado, con menos injusticias y menos corrupción.

Lamentablemente, la alternancia del 2018 no trajo los cambios esperados. Con el cinismo que lo caracteriza, AMLO empezó a construir el teatro de las mentiras desde el día uno de su mandato.

El argumento central fue continuar en campaña durante seis años; gobernar para todos fue lo de menos. Lo que se buscó y se obtuvo fue una acumulación desmedida de poder. Logró la oligarquía que se propuso, al tiempo que atacaba a todos los que piensan distinto que él.

AMLO sostiene que no hay casos graves de corrupción en su gobierno

La tragicomedia sexenal que vivimos todos los mexicanos tiene un perfil maquiavélico, pues fuimos víctimas de una manipulación del terror.

Lo que hizo López fue dividir al pueblo, darle atole con el dedo a los más desaventajados, mentir sin ton ni son, responsabilizar a otros de sus malas decisiones y fracasos, ignorar muchos problemas, ningunear los contrapesos institucionales, aplastar a la oposición, y dejar el camino listo para que su legado de odio persista.

Al final, el pueblo fue usado para maléficos fines electorales y poco más.

No hay que ser genios para saber que el gobierno de López Obrador tendrá consecuencias negativas instantáneas, lo veremos en los temas de seguridad, en las inversiones, la economía y las relaciones internacionales. A corto plazo, en el poder judicial y en la desaparición de los órganos autónomos. El país está en incertidumbre de cuán profunda y duradera será la destrucción.

Afortunadamente el sexenio termina, sin duda la presidenta Sheinbaum hereda un poder acotado y lleno de funcionarios que hoy tienen su lealtad con el pasado.

Claudia Sheinbaum

Confío en que la presidenta tenga intención de acabar con las mentiras y los otros datos. Confío en el gran poder de la silla presidencial y poner fin al teatrito. Confío en que la voz de todos los ciudadanos ahora sí sea escuchada.

Así que nuevamente pecaré de inocente y tendré esperanza en que este sexenio que inicia será el bueno para nuestro país. Es hora de gobernar inteligentemente.

Ganadores y perdedores demuestren el amor que le tienen a la patria, y aunque sea un poco de educación en el acto político y protocolario más importante de nuestro sistema de gobierno.

Black Out

Estoy de acuerdo con la Reforma Constitucional sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas y Afromexicano. A favor del reconocimiento y respeto.

Me preocupa que la nueva dirigencia de MORENA reconozca el liderazgo de la Dra. Sheinbaum y que también respeten la envestidura del Poder Ejecutivo.

¿Sería mucho pedir que, la próxima semana, en la toma de protesta, no haya gritos y sombrerazos? Ganadores y perdedores demuestren el amor que le tienen a la patria, y aunque sea un poco de educación en el acto político y protocolario más importante de nuestro sistema de gobierno.

Con este artículo termino esta temporada de opiniones sobre el periodo de transición de gobierno en el 2024. Gracias a todos los que me ayudaron y a los que me brindaron su tiempo de lectura y de crítica constructiva. Hasta pronto.